México ignorante.

México ignorante.

Por Isabella González, Alumna de Practicum 1.

El olor a papel, el ruido de las hojas al pasar una vez que has terminado una página y sobre todo, los miles de lugares que puedes visitar, las historias que vives, son sentimientos que sólo provoca leer un libro.

Sin embargo, en México la cifra de estos privilegiados es alarmante. En una lista recientemente publicada por la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación) nuestro país se encuentra en el penúltimo lugar de 108 países sobre el índice de lectura siendo Japón el primero en la lista. El 91% de los japoneses tiene un hábito permanente de lectura, mientras que en México tan solo el 2% de la población tiene la costumbre de leer. 

Lo peor de esta noticia es que no sólo los mexicanos leemos casi nada, sino que además el hábito de lectura va disminuyendo con el tiempo. Según datos de la Encuesta Nacional de Lectura 2012, el promedio actual de lectores en nuestro país es de 46% cuando hace seis años era de 54.6%.Cabe recalcar que entre los jóvenes de 12 a 17 años, 30% dice que no les gusta leer, 61% que no tiene tiempo. ¿No te parece extraño que las cifras de la UNESCO sean abismalmente diferentes a las nacionales?

Los mexicanos prefieren ver el “Clásico” o la novela de las nueve en la tele, a leer un buen libro en su tiempo libre. Creo que es ilógico. Incluso a Alonso Quijano –mejor conocido como Don Quijote- en su demencia le hubiese parecido absurdo, cuando en los libros se puede refugiar en un mundo de aventuras, caballería y cultura. Su escritor lo resumiría a la perfección en una frase: “El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho.”

Entonces no es de sorprenderse cuando en el examen PISA de matemáticas el porcentaje de alumnos en nivel avanzado sea de 0.7 o cuando la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) califique a nuestro país en una escala del 1 al 10 con 6.8. Reprobados. Tampoco nos extrañemos al ver letreros que recen “Se bende” o “Fabor de guardar cilencio”  mucho menos si todos terminamos escribiendo ¡ay!, hay y ahí sin diferenciarlas.

Vivimos en un mundo que va demasiado rápido, en el que no nos damos un tiempo de descanso de todo lo que nos bombardea: la tecnología, la televisión, la publicidad, el tráfico. Nos da pereza hacer un alto y realizar una actividad que requiere de tiempo, paciencia y mucha concentración. La lectura es un hábito que se aprehende mejor en la infancia y por parte de una familia que tenga esta práctica cotidiana.

Desgraciadamente la mayoría de los mexicanos no tienen quien  les herede el conocimiento del valor literario, y aún así que la lectura se pueda impulsar por otros medios no es una fantasía.Todos debemos de poner un granito de arena: los que leemos intentar contagiar a los que no leen, y los que no leen dejarse contagiar.

El gobierno, los maestros y la recientemente creada Comisión de Fomento a Lectura en el Congreso de la Unión deben de poner su mayor esfuerzo en promover la literatura, y no porque un día lleguemos a estar en los primeros lugares de la lista ya antes mencionada de la UNESCO, sino porque encontremos el verdadero significado e importancia de la lectura.

Fuentes

CNN Expansión . (s.f.). Obtenido de México, ‘reprobado’ en educación en 2012: http://www.cnnexpansion.com/mi-carrera/2012/12/04/la-educacion-en-mexico-en-2012

De Panzazo. (s.f.). Recuperado el 2 de septiembre de 2013, de http://depanzazo.mx/numeralia.aspx

Excélsior. (s.f.). Recuperado el 2 de septiembre de 2013, de México vive crisis de lectura: http://www.excelsior.com.mx/comunidad/2013/04/20/894944

Proceso. (s.f.). Recuperado el 2 de septiembre de 2013, de Entre 108 países, México es penúltimo lugar en lectura: http://www.proceso.com.mx/?p=339874

UNIVISION. (s.f.). Recuperado el 2 de septiembre de 2013, de Quién lee más y mejor en el mundo: http://archivo.univision.com/content/content.jhtml?cid=1072656