Las cuevas de Naica

Por: Eloísa López González

• Cuevas de cristal únicas en el planeta
• Documentales para incentivar la cultura
• NatGeo busca nuevos talentos.

8 de marzo de 2012. Sala de Exposiciones de la Universidad Anáhuac. “Contenidos positivos para el mundo” fue el tema de la mesa redonda llevada a cabo por los conferencistas Carmen Larios Laris, vicepresidenta de Programación, Producción y Desarrollo de NatGeo;  Rafael Salinas Farfán, director de marca de National Geographic Channel, y Saúl Villasante Sais, productor de la compañía CProducción. Durante la charla se puso de manifiesto que uno de los principales descubrimientos que ha llevado a cabo NatGeo son las cuevas de cristal “Naica”, situadas en el estado de Chihuahua; Saúl Villasante aclara que es un tesoro, tanto de México, como del mundo.

Este conjunto de cavernas es único en el planeta, porque –contrario a las hipótesis de los científicos- tiene enormes rocas cristalizadas, de hasta 15 metros de longitud. En Chile existe una cueva muy parecida, pero la longitud de sus formaciones geológicas no supera los cuatro metros de largo.

Naica no es un lugar para humanos, porque tiene una temperatura de 50 grados Celsius en su interior. Para poder entrar es necesario usar trajes especiales, confeccionados a base de tubitos de hielo,  que sirven para compensar las altas temperaturas; sin embargo, los investigadores solo pueden permanecer dentro las cavernas, situadas a 300 metros bajo la superficie, no más de 40 minutos. Estar más tiempo, con ese calor y una humedad del cien por ciento, conlleva el riesgo de que los pulmones de los exploradores se llenen de agua.

Las altas temperaturas llevaron a los documentalistas a innovar en los métodos de grabación, para lo que recurrieron a remedios caseros. Al principio, el equipo tardaba alrededor de nueve horas en grabar una sola toma, la cual, luego de la revisión de rigor, no pasaba las pruebas de calidad. La paciencia y la constancia fueron sus herramientas para terminar la investigación y la exploración de las cuevas de cristal.  El intenso calor y la humedad hacían que el trabajo se volviera más tedioso y más pesado, sin embargo “valió la pena”, según las propias palabras de Saúl Villasante, porque sirvió para se descubriera la última maravilla que el hombre haya conocido, y está aquí, en nuestro México.

NatGeo busca historias reales para la gente real, con el fin de dar a la audiencia relatos con los que se sientan identificados. Es por eso que está abierto a recibir proyectos de gente externa a su personal, como sucedió con CProducciones, para seguir innovando en el mercado y explotar el talento mexicano.

      Estudiante de Comunicación